Por: Efraín Miranda, CONAPE
Para nadie es un secreto que nuestro país enfrenta una crisis económica ocasionada por la pandemia del Covid-19 y que esto, ha generado altos niveles de desempleo, ajustes en los salarios de miles de trabajadores y afectaciones en el presupuesto de muchas familias.
Esa inestabilidad económica e incertidumbre por el panorama ha provocado, a su vez, zozobra en muchos jóvenes, quienes ven amenazada la continuidad de sus estudios y, pese a sus enormes ganas por cumplir su meta profesional, una gran cantidad debe posponer su formación.
Lamentablemente en muchas ocasiones es la educación la gran sacrificada y eso es lo que queremos evitar desde CONAPE. Tenemos muy claro que si algo requiere el país para su desarrollo socio-económico, es la formación de más profesionales.
En línea con esto, no hay duda de que es clave el apoyo a quienes menos recursos tienen para estudiar. Debemos enfocar nuestros esfuerzos como país, en apoyar a los jóvenes que desean formarse técnica o profesionalmente, pero su situación económica no se los permite.
Por eso creemos firmemente que, sumando esfuerzos, podemos brindarles oportunidades a los estudiantes que así lo requieren. Bajo esta premisa, estamos en acercamientos con diversas universidades, con el objetivo de establecer convenios que les permitan a los centros educativos, aportar una parte de la garantía, para respaldar el préstamo educativo de los estudiantes que lo necesiten.
En medio de esta coyuntura, existe una disminución en las posibilidades de las personas para aportar garantías que respalden un crédito de cualquier tipo; en el caso de un préstamo educativo, se estima que más del 94% de los solicitantes solo tienen la opción de aportar fiadores como garantía, pero debido al contexto actual y la inestabilidad socio-económica, así como la preocupación por la crisis, hay una mayor discreción por parte de quienes podrían figurar como fiadores.
Sabemos que muchos jóvenes no poseen la totalidad de la garantía y que de esto depende su futuro profesional. Por eso, ya estamos en conversaciones con cuatro universidades privadas, las cuales, están valorando la propuesta que les presentamos, para crear un convenio que les ofrezca a sus estudiantes, mejores condiciones para el acceso a un crédito educativo.
Actualmente tenemos un convenio con la Universidad Latina y la Universidad Americana, con el que desde enero se han recibido 31 de solicitudes de financiamiento por parte de estudiantes de estas universidades, las cuales, están finalizando su proceso de aprobación.
Nos llena de gran satisfacción ver que estos esfuerzos van rindiendo frutos y tenemos la certeza de que cuando más convenios logremos establecer, muchos más serán los jóvenes beneficiados, porque son ellos nuestra razón de ser y el futuro del país.
Estos esfuerzos conjuntos son los que el país necesita, porque ante el panorama actual, debemos propiciar un mayor acceso a la educación superior. Hoy, más que nunca, es momento de ir más allá y de trabajar en equipo, para que la falta de apoyo económico no sea un obstáculo en el futuro de miles de estudiantes. Ese ha sido y será siempre nuestro compromiso.
Estamos confiados en que este tipo de convenios son clave para el sector de la educación en general y, por ende, para el desarrollo del país. Aplaudimos y reconocemos la anuencia de las universidades que nos han recibido, para buscar soluciones y brindarles condiciones favorables en beneficio de los estudiantes.
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