A partir de este fin de semana Costa Rica estará en déficit: el país ha gastado más de lo que puede recuperar en un año. Pero esta vez no nos referimos a la situación fiscal, sino a un tema que igualmente resulta preocupante: el manejo de los recursos naturales.
De acuerdo con la proyección de la organización Global Footprint Network, el 2 de setiembre es el “Día del Sobregiro” ambiental para Costa Rica, es decir, estamos superando nuestra capacidad anual de renovación de los recursos naturales en casi cuatro meses.
Esto no significa que nos estemos quedando sin recursos. Para entenderlo un poco mejor, Liliana Jiménez, de la Fundación FunTropos, compara la situación con aquellos momentos en que gastamos más dinero del que tenemos ahorrado y debemos endeudarnos: lo mismo pasa con el acervo ambiental.
Escuche las declaraciones de Liliana Jiménez, de la Fundación FunTropos.
“Este año, a nivel mundial, tuvimos el Día del Sobregiro más temprano (el 1 de agosto) y también para Costa Rica”, comenta Raquel Mejías, de la Unidad de Gestión Ambiental del Instituto Tecnológico de Costa Rica. “Si todo el mundo consumiera recursos como consume Costa Rica, necesitaríamos 1.5 Tierras”, amplía.
Entonces, ¿corre peligro la abundancia de recursos naturales de la que presumimos los costarricenses?
Áreas protegidas: nuestro seguro
En comparación con otros países, tenemos todavía mucha cobertura boscosa y reservas importantes de agua dulce, entre otros bienes ambientales valiosos. Esto se debe, en gran medida, a los esfuerzos que se han hecho en el país por crear y preservar parques nacionales, reservas biológicas y otras áreas protegidas.
El problema es que cuando una sociedad consume recursos sin hacer esfuerzos por compensar ese consumo, eventualmente debe echar mano de esas zonas que hasta entonces se mantenían intactas.
Escuche las declaraciones de Liliana Jiménez, de la Fundación FunTropos.
De acuerdo con datos oficiales del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), el país cuenta con 125 áreas protegidas que constituyen poco más del 25% del territorio costarricense. A esto se le suman dos áreas marinas de más de 1 millón de hectáreas en total. La sostenibilidad ambiental de nuestras futuras generaciones es una cuenta a plazo que se alimenta de la adecuada preservación de estos santuarios biológicos.
Mayor conciencia ambiental
La tendencia a gastar los recursos naturales cada vez más temprano aún puede revertirse, pero debemos tomar acciones urgentes tanto a nivel gubernamental como individual.
Para Liliana Jiménez de FunTropos, es un error pensar que las áreas protegidas son la única fuente de recursos con la que podemos contar para mejorar nuestro desempeño ambiental. Una solución sería, por ejemplo, volver a producir en huertas algunos productos que hoy compramos en un supermercado, es decir, “que cada espacio individual se convierta en una mini fuente de recursos”.
Raquel Mejías, del TEC, añade que debemos prestar especial atención en “lo que compramos, de dónde viene lo que consumimos, cuánto alimento desperdiciamos, cómo tratamos nuestros suelos; también influye mucho cómo consumimos y cómo producimos”.
A nivel de gobiernos, tanto locales como nacionales, las acciones pasan por mejorar la protección de zonas de reserva, promover el transporte público o fuentes de energía más limpias y renovables como alternativa al petróleo, así como una mejor planificación de los espacios habitados que tenga en cuenta y compense el impacto ambiental.
Con estas medidas, algunas más sencillas y otras que requieren un mayor grado de compromiso, en algunos años podremos llegar a diciembre sin haber agotado los recursos que puede renovar nuestro territorio, e incluso podríamos comenzar a ahorrar de una forma más eficiente para el futuro.
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Alejandro Portilla Navarro
Periodista, locutor, productor audiovisual y diseñador web. Bachiller en Periodismo y en Producción Audiovisual de la Universidad de Costa Rica.
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