Por: Gilbert Porras, presidente de AIMA
Para la Asociacion de Importadores de Motocicletas y Afines (AIMA), el proyecto de Ley 24137 que tiene como fin de mitigar la cantidad de asesinatos perpetrados por gatilleros, presentado por el diputado Alejandro Pacheco, expone una apreciación errónea hacia todos lo conductores de motocicletas en el país.
Esta apreciación parte de la premisa equivocada en la que todo aquel que viaja en una motocicleta es un delincuente o un delincuente en potencia lo que se configura un estigma producto de una categorización discriminatoria sin tomarse en consideración que, por ejemplo, en las zonas rurales de nuestro país, la motocicleta se ha constituido en un medio idóneo de transporte y de trabajo mediante el cual se facilita la movilidad, sumado a sus características como el precio y la fácil accesibilidad. Ni que decir de las zonas urbanas, en las que la motocicleta adicionalmente se ha convertido en una herramienta de transporte y trabajo eficiente generalmente usada por personas de medios y bajos recursos.
Las medidas o disposiciones que se pretenden imponer carecen de sustento y no se basan en un estudio objetivo que evidencie la efectividad de la eventual aplicación de la solución que se propone. Además, de aplicarse esta medida se estaría violentando el libre tránsito de los ciudadanos.
La propuesta planteada de restringir el uso de la motocicleta para que no pueda viajar un acompañante masculino, no tiene respaldo alguno de su efectividad en la solución al problema que se pretende atacar, y podría estar violentando principios constitucionales como el del libre tránsito de más de 350 mil motociclistas trabajadores honestos que utilizan este medio de transporte. El verdadero problema radica en la legislación actual y en la interpretación judicial que obliga a los jueces a liberar a los delincuentes. Por tanto, la solución no debe centrarse en restringir el libre tránsito, sino en cambiar las leyes y fortalecer el sistema judicial para asegurar que los responsables sean procesados adecuadamente, sin afectar injustamente a los ciudadanos que cumplen con la ley.
AIMA manifiesta su total apoyo a los esfuerzos para reducir el crimen en el país pero con medidas más efectivas que no afecten la libertad de tantos ciudadanos honestos y se pone en disposición para atender consultas referentes a esta temática, con el fundamento de los años de experiencia que tiene esta organización frente al sector comercial de este tipo de vehículos.
Someter a los motociclistas a estas restricciones no es la solución, el problema continuo porque los sicarios pasarán a utilizar carros u otros vehículos y encontrarán otra forma de cometer los actos delictivos. Para esta organización es de suma importancia poder aportar nuestras observaciones basadas en la experiencia que nos ha dado muchos años en el uso de este medio de transporte.Para esta organización es de suma importancia la seguridad de la ciudadanía y el bienestar de todos los costarricenses.
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