Con más fuentes de energía y sistemas más modernos, las empresas industriales de Costa Rica están haciendo importantes apuestas por la descarbonización y la sostenibilidad. La tendencia global es el desarrollo de microrredes donde se incorporan energías renovables con baterías y dejan la quema de hidrocarburos como última opción.
Una microrred fotovoltaica es un sistema que genera y distribuye electricidad a partir de energía solar. Se conforma por paneles solares, inversores, baterías para almacenamiento y plataformas de control energético inteligente, que incluso puede administrar otros activos eléctricos como plantas de emergencia, bancos de hielo, esquemas de deslastre de carga, entre otros.
Las microrredes pueden operar conectadas a la red pública, funcionando en paralelo con esta, provocando ahorros sobre el gasto eléctrico. También pueden trabajar de manera independiente, brindando confiabilidad energética, sobre todo en aquellos casos de fluctuación en voltaje o apagones del servicio público. En estas situaciones, la energía se sostiene a través de la microrred por un tiempo definido, previo a prender una planta de emergencia y gastar combustible fósil.
Un paro en una planta de producción de alimentos podría significar millones de colones en pérdidas económicas y complicaciones logísticas, por lo tanto, estas inversiones son también una garantía para la continuidad del negocio.
Ante accidentes, condiciones climáticas o por los avisos de racionamientos eléctricos hechos por el ICE en mayo, las empresas que ya cuentan con una microrred tuvieron mayor seguridad en su operación, mientras otras industrias se enfrentaron con la incertidumbre.
Caso de éxito en Bimbo
Angélica Barrero, gerente de Sustentabilidad de Bimbo comentó:
Nos enorgullece liderar el camino y servir de inspiración para todas las empresas en Costa Rica que buscan contribuir a la causa de cero emisiones. Estamos comprometidos a transformar la forma en que operamos y producimos, y por ello adoptamos la energía solar en nuestras panaderías y centros de distribución de la mano de Greenenergy. Y así, cada vez que los costarricenses coman Bimbo, ahora podrán decir que están disfrutando un producto hecho con energía solar.
El objetivo de la microrred de Bimbo Costa Rica es hacerle frente a la inestabilidad del sistema eléctrico tradicional que han experimentado históricamente, con más de 30 eventos transientes rápidos (por sobretensión) al mes, y un promedio de 10 pérdidas de alimentación eléctrica no programada. Con las innovaciones tecnológicas, este año se han solucionado en milisegundos el 100% de los eventos rápidos y un 90% de los eventos mayores, como pérdidas de alimentación. Esto redujo el consumo de combustible fósil, el estrés operativo y el impacto económico.
Según aseguró Fernando Ortuño, fundador de Greenenergy:
Nuestro liderazgo y alto conocimiento en microrredes y almacenamiento, nos alió a esta reconocida empresa para llevar a cabo su nuevo sistema de autoabastecimiento energético, y su aprovechamiento para una mayor calidad y seguridad de energía, generación de ahorros, y reducción de la huella ambiental.
490 paneles solares equivalen al 5% de energía
En la planta de producción de Bimbo, en Heredia, la microrred cuenta con 490 paneles solares que generan 210 kilowatts pico (kWp) de potencia máxima, que proveen en promedio el 5% de la energía que consume la planta anualmente. Además, integra un sistema de almacenamiento de 1.3 MW en inversor y 2.7 MWh baterías, con un controlador inteligente que permite dar un esquema de respaldo por hasta 2h continuas sin que tengan que prender la planta de emergencia y quemar combustible fósil, que es lo tradicional.
La batería de la microrred de Bimbo es tan poderosa que equivale a la energía que consumen 300 casas en 1 día, 22.000 km recorridos con un vehículo eléctrico, y su peso es aproximadamente el de 3 elefantes africanos.
Por otra parte, la compañía también apuesta por la energía solar en un centro de distribución y tres centros de venta en Costa Rica, los cuales están ubicados dentro del Gran Área Metropolitana. Acá suman más de 300 módulos solares, que generan más de 162 kilowatts pico.
En total, Bimbo podrá mitigar anualmente más de 29 toneladas de dióxido de carbono (CO2) en promedio, que equivale a plantar más de 1.300 árboles por año aproximadamente. De esta forma, se abocan a convertirse en una empresa con cero emisiones netas de carbono para el año 2050.
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