Una base de datos de clientes, para efectos de mercadeo digital, asegura a las empresas una comunicación ágil, segmentada y efectiva con sus diversos públicos, mediante canales como email, redes sociales, mensajes de texto y otros.
Su uso además permite a las compañías ofrecer productos y servicios según los gustos y preferencias de cada consumidor, a la vez que permite personalizar su comunicación con el objetivo de informar y educar al cliente para asegurar que capte mejor y más rápido el mensaje.
Antes de elaborarla, se debe considerar que toda base de datos deberá contar con la aprobación o consentimiento del cliente, de otra forma la empresa no podrá utilizar su información.
Cómo crearla
De acuerdo con Mauricio Leandro, gerente del Centro de inteligencia analítica de Coopeservidores (CS), para iniciar la construcción de una base de datos, la empresa puede comenzar captando únicamente el correo de un posible cliente o consumidor potencial de su producto, como por ejemplo, la persona que se suscribe en su blog informativo. Ese será el primer indicio de que está interesado en su producto o servicio.
"A partir de ese momento, la empresa podrá implementar un plan de mercadeo por medio de email para acelerar ese proceso. Este plan consiste en una serie de envíos de email a esos suscriptores, mediante los cuales la compañía enfocará sus esfuerzos en informarlos, educarlos y fidelizarlos con información que les aporte valor", explicó Leandro.
Por medio de este plan de mercadeo y, una vez que la empresa tenga definido qué información desea captar, puede comenzar a recolectar más datos de los clientes potenciales que muestren interés por alguno de sus productos o servicios. Esta información puede ser nombre, número de cédula y teléfono. Si posterior a esta etapa el cliente continúa mostrando interés, la empresa puede optar por recolectar aún más datos, como algunos gustos y preferencias del consumidor.
“Lograr el éxito en la comunicación de nuestra empresa depende de conocer quién es nuestro consumidor y cómo podemos satisfacer sus necesidades con nuestra propuesta valor. En medio de una crisis actual como la que vivimos, resulta indispensable poder conectar con nuestros clientes y lograr esa fidelización”, concluyó el gerente del Centro de inteligencia analítica de CS.
Herramientas según tamaño de la compañía
Para elaborar una base de datos se debe tomar en cuenta el presupuesto y el tamaño de la organización. Si es una empresa pequeña, se puede optar por herramientas básicas como Excel o Access. Inclusive, en la actualidad existen plataformas de Customer Relationship Management (CRM) en la nube que son gratuitas pero con restricciones de capacidad.
Si por el contrario es una empresa grande, es ideal una herramienta robusta de CRM, la cual, además de realizar la captura de la información básica del cliente, también proporciona información adicional como el historial del comportamiento digital de la persona, el historial de tenencia de productos, fecha de cumpleaños, aniversarios y otros. Según Leandro, esto sin duda permitirá mejorar la relación con los clientes.
"Recuerde que para la actualización de una base de datos es necesaria la implementación de mecanismos automatizados que le ayuden a minimizar posibles errores en el registro de los datos. Además, es recomendable actualizarla como mínimo una vez al año, aunque esto dependerá del giro de negocio, las capacidades organizacionales y el tipo de información que se almacene en la base", concluyó el experto.
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